12 de agosto de 2008

Hamedan + Qazvin

Los colegas llevan ya unos días en Irán, y aparte de estar en Teherán he aprovechado para acompañarles en una excursión que tenía pendiente: Hamedan, una de las poblaciones más antiguas de Irán (= del mundo), antigua capital del Imperio Persa (Ecbatana) enclavada al oeste del país, en el inicio de la cordillera de los Zagros que le separa de su vecino Irak. Toda la zona es uno de los destinos más recurridos en verano por la población local que acude en pos de un refugio de la canícula que asola la mayor parte de este bendito país.

Álbum completo en el link de "Mis Fotos" de Picasa.

Cuevas de Ali Sadr, Irán.La excursión la planteamos en un monovolumen medianamente cómodo con el que recorrimos los 300km que nos separaban desde la capi. Salimos temprano, tras una hora dejamos atrás el tráfico de la urbe y enfilamos las desiertas praderas iranís por sus más que aceptables carreteras. A la hora de comer llegamos a nuestra primera parada, las cuevas de Ali Sadr; unas cuevas célebres por ser las más grandes del mundo navegables. Comimos el sempiterno kebab y allí q fuimos entre la marabunta iraní. Porque es una atracción local, y eso es algo que se nota desde la entrada, 3,5€ por persona cuando en Persépolis se paga 0,35€... las cuevas la verdad es que son impresionantes. Muy grandes. Muy altas y con las estalactitas y estalagmitas de rigor. El asunto, muy iraní: barcas del año de la polca remolcadas por un velomar, colas para subir con la gente atosigando y familias enteras disfrutando de la atracción. Curioso, y bonito. 4,5km en barca, una vuelta a pie y vuelta al coche rumbo a Hamedan.

Grabados aqueménidas, Hamedan. Irán.En Hamedan primero acudimos a apreciar los grabados aqueménidas (500 a.C.) cuneiformes y una cataratilla alrededor de la cual se reunía una multitud. Pintoresco. Nos instalamos, cenamos y dimos una vuelta por el parque central, en el que debían celebrar alguna efemérides porque estaba repleto de tiendas de campaña y había 2 escenarios... a un lado hombres, a otro mujeres, je, je. Y en el otro cantando una figura local bajo la atenta (y silenciosa y callada) parroquia local. Está prohibido bailar, así que hay que guardar las formas, no vaya a ser... Al día siguiente le dimos una vuelta a la ciudad: ruinas persas (muy poco en pie), mausoleo local, mausoleo judío de Mardokai (nos dijo el guardián que es el 2º lugar santo de los judíos tras Jerusalem, yavestruz) y el bazar. De ahí al coche rumbo a nuestra próxima parada.

Mezquita en Qazvin, Irán.Qazvin se encuentra al noroeste de Teherán, en la carretera que une la capital con el Caspio de una parte y con Tabriz de otra, que queda más alejado, pegando con la frontera turca. Tiene sus encantos. Una puerta de entrada de la ciudad al estilo arco del triunfo, una mezquita del viernes con un gran patio cuadrado y bonitas fachadas, un mausoleo santo junto a un cementerio de los mártires en donde se reúnen las familias a la sombra, y un palacio de antiguas dinastías en bastante mal estado. De ahí a casa, a comer una tortilla con la que mis desacostumbrados amigos soñaban tras 4 días de dita kebabiana.

La excursión me permitió conocer otra ciudad de este vasto país, y a ellos introducirse de lleno en la cultura autóctona, ya que no vimos en los 2 días más que a 2 turistas (¡curiosamente españoles!) y pudimos ver todo a nuestro antojo. Tras este inicio, la cuadri ha seguido la ruta que les tracé y aún están inmersos en su periplo viajero por Irán. Ya lo contarán ellos, ¡pero creo que muy contentos!

2 comentarios:

Unknown dijo...

Suscribo lo arriba descrito por el inigualable amigo a la par que gran orador y mejor escritor conocido bajo el sobrenombre de Tuso sobre estas líneas. Grandes jornadas recorriendo Persia envase de pvc en mano con objeto de soliviantar el calor propio de estas latitudes en esta época estival. Si no se ha notado pretendía emular nuestro anfitrión pero es imposible..La verdad es que ha molado mil la vuelta a Irán y sobre todo poder disfrutar de monumentos que en algunos casos llegaban a los 4000 años en soledad..sin turistas ni pesados vendedores de souvenires. Me quedo con Yazd y sus casas de adobe y con la plaza del imán de Isfahan..acohonante..500x100 metros de plaza jalonada, perdón, rodeada por mezquitas, palacios y el bazar..vamos que este viaje es inolvidable y más que recomendable. Se rompen mitos como el de la seguridad y se conoce un país que otrora fuera cuna de civilización, un país sometido a una represión religiosa brutal y cientos de ejemplos de arquitetura musulmana que podrían hacer temblar a las más famosas mezquitas de la mismísima estambul..
En fín que estamos de coña, que por ahora va molando mil y que quedamos eternamente agradecidos a Mr. García.

Tuso dijo...

JA, JA, JA!!

Jué!! Te veo con ganas de escribir, móntate tu blog!! Ja, ja!!

Me alegro q hayáis disfrutado, yo lo he hecho con vuestra visita.

Nos vemos en Donosti!!!

“Más vale una vez colorado, que ciento amarillo”

Sabio proverbio ;-)